Orquesta de cámara del Concertgebouw

Eine Kleine Nachtmusik (Pequeña serenata nocturna), quizá la obra más conocida de Mozart, sigue siendo una de las más enigmáticas. Fue escrita en 1787, año en el que hay pocas referencias sobre su vida; nadie está seguro por qué de pronto Mozart escribió una música tan gentil y encantadora, dada la muerte de su padre en mayo en Salzburgo. Mozart trabajó el resto del año en la composición de Don Giovanni; se dice que en esas fechas pudo conocer y dar algunas clases a un joven de dieciséis años originario de Bonn de nombre Ludwig van Beethoven, pero la evidencia es incierta. Todo lo que se sabe es que Mozart interrumpió la composición del segundo acto de Don Giovanni para componer esta serenata; el manuscrito está fechado el 10 de Agosto. Usualmente este tipo de piezas estaban pensadas para algún evento social , pero no hay registro de tal cosa y Mozart no había escrito una serenata para cuerdas desde sus días en Salzburgo. Dos siglos después, los orígenes de Eine Kleine Nachtmusik siguen siendo misteriosos.


El título de la obra es original del compositor. Nachtmusik significa “música nocturna” o “música para la noche”, pero el sentido más aceptado es el de una serenata, entendida como una pieza instrumental con énfasis en la melodicidad. La instrumentación original era de un quinteto de arcos (cuarteto más contrabajo), pero puede tocarse sin ningún problema en cuarteto u orquesta de cuerdas. Esta serenata tenía cinco movimientos en su forma original, pero el segundo movimiento, un Minuetto, fue arrancado del manuscrito de manera anónima y ha desaparecido.

Una música tan encantadora requiere poca descripción o comentario. El Allegro inicial es una forma sonata en miniatura construido sobre el grácil tema inicial y una segunda idea de mayor claridad anunciada por el primer violín.  El desarrollo es bastante breve antes de una rápida recapitulación de ideas que conduce hacia un final basado de nuevo en el tema principal. Este movimiento avanza con sorprendente fluidez en toda su extensión, un rasgo peculiar incluso tratándose de Mozart.   

El segundo movimiento es un Romanze, término usado para indicar música expresiva y silenciosa. De hecho, este movimiento se trata de un rondó con dos episodios contrastantes. El tercer movimiento es un Minuetto y trio, el primero de carácter robusto y la sección de trío está coloreada por escritura cromática.  El movimiento final es otro rondó, un Allegro con una boyante idea principal que salta ascendentemente con energía. Una vez más, la escritura cromática de Mozart provee oscuridad y expresividad en medio de los momentos más luminosos.

Eric Bromberger para La Jolla Music Society