El musicólogo británico Norman Lebrecht propone que la celebérrima Bagatela no. 25 en la menor, de Beethoven, conocida como “Para Elisa”, nunca fue dedicada por el músico a una persona llamada Elisa; la dedicatoria fue agregada más tarde por la propietaria del manuscrito.
Otros especialistas especulan que la pieza fue dedicada a una cierta Teresa. Es cierto que Beethoven tuvo una alumna Therese de Brunswick, con quien sostuvo una relación amorosa de 1806 a 1808 y a quien había dedicado la Sonata para piano no. 24, “A Therese”. Otra posibilidad: Therese Malfetti, música austriaca, quien rechazó la propuesta matrimonial de Beethoven pero que tuvo en sus manos la “Carta para Elisa”. Entonces, ¿cómo se transformó Therese en Elisa?” También se ha sugerido que una solterona, Babette Brede, propuso al editor de la pieza, el musicólogo Ludwig Nohl, el nombre de Elisa, como dedicatoria.
Lebrecht comenta que Beethoven se hubiera muerto de risa ante los esfuerzos académicos por descubrir quién fue “Elisa”; Lebrecht es autor de Why Beethoven? y editor del sitio Slippeddisc.
Fuente: Philippe Gault, en Radio Classique.
Marnie Laird, piano
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