El sábado pasado, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) estrenó la ópera Aída Politécnica, una recreación en contexto mexica de la Aída de Verdi, con subtítulos en náhuatl, y en español. Se presentará nuevamente el martes 19 y el jueves 21, ambas a las 18:00hrs. y el sábado 23, a las 13:00hrs. Centro Cultural Jaime Torres Bodet, auditorio Ing. Alejo Peralta, Av. Wilfrido Massieu s/n, casi esquina c/av. IPN, Col. Zacatenco. Boletos en taquilla. Reservaciones al 5729 6000, ext. 53611.
El sábado 23 la podrá ver en transmisión en vivo, por el Canal ONCETVMEXICO, del IPN.
Participan en esta producción Fabiola Venegas, como Aída, José Manuel Chú, Belem Rodríguez, Charles Oppenheim, Rosendo Flores, Liliana Aguilasocho y Edgar Villalba. Dirige el maestro Iván López Reynoso y César Piña en la dirección escénica. La traducción al náhuatl fue realizado por Natalio Hernández, “uno de los más importantes poetas, especialistas y promotores de las lenguas indígenas en México”, según la información del IPN.
Aída Politécnica se ubica en un contexto diferente al de Egipto: los personajes han sido mexicanizados y la acción se desarrolla así: Narra la historia de una joven estudiante, de nombre Aída, quien durante una visita de práctica escolar a las pirámides de Teotihuacan, se queda dormida en el autobús, escuchando la música de la ópera de Verdi. De pronto, la alumna del IPN se ve inmersa en un sueño en el que su inconsciente la lleva no a Egipto sino a Tenochtitlan, en el año 1450, convirtiéndose en el personaje principal de una trama ubicada en el mundo mexica. En el marco de una Guerra Florida en puerta, entre mexicas y tlaxcaltecas, se desarrolla la historia del romance entre Aída – princesa tlaxcalteca hecha esclava – y Radamés – un guerrero águila mexica – quien comanda la lucha contra el pueblo de su amada. Ambos se encontrarán en situaciones de intriga, despecho, ambición, guerra, traición, en las que todo presagia estar destinado a la fatalidad – como en la trama de la Aída egipcia.
Fuente: Ricardo Pacheco Colín, El Economista.
Comentarios