Inscrito en las corrientes vanguardistas más avanzadas de la posguerra, la obra de Berio sorprende por su absoluta novedad. Interesado por las posibilidades de los medios electroacústicos, durante su etapa en el Estudio de la Fonología Musical de la RAI, llevó a cabo una interesante labor experimental, aplicada posteriormente en algunas de sus composiciones.
En su producción, música y voz juegan un papel de reciprocidad, cuidadosamente estudiado, en el que el significado lingüístico y el musical alcanzan un perfecto equilibrio. Su colaboración con la cantante estadounidense Cathy Berberian (1928-1983), para quien escribió varias obras, fue particularmente productiva. Uno de los rasgos más llamativos de su estilo es su hábil y original uso del collage, evidente en partituras como Sinfonía para ocho voces y orquesta (1968), en la que se dan cita los más diversos elementos literarios y musicales. De su composición para la escena, destacan la ópera La verdadera historia (1986). En su producción posterior, Berio demostró cierta tendencia a dar mayor participación a la orquesta sinfónica tradicional.
Este fin de semana, la Orquesta de Minería tocará Voci (Folk Songs II), obra de 1984, en la Sala Nezahualcóyotl, sábado 10 a las 20:00hs. y domingo 11 a las 12.
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