Lo mejor de … Haydn

Difícil seleccionar obras “esenciales” de Haydn, uno de los compositores más prolíficos e influyentes de la historia de la música. Esta es una propuesta:

• Sinfonía no. 103, “Redoble del timbal”. Una de las últimas doce sinfonías que escribió para sus visitas a Londres, “El redoble del timbal” es una excelente introducción al estilo más juguetón de Franz Joseph Haydn (1732-1809), vivaz, como el latido del corazón. Haydn compuso 104 sinfonías.
• Cuartetos de cuerda, op.33. Reconocidos como sus mejores cuartetos, el conjunto op.33 incluye uno titulado “El pájaro” por la parte solista del primer violín y otro, “La broma”, por razones evidentes en el segmento final. Haydn compuso 83 cuartetos de cuerda, diecisiete tríos para cuerdas, treinta y un tríos para piano e innumerables piezas de cámara cortas.
• Concierto para trompeta, en mi bemol, de 1796. El genio de Haydn transformó este instrumento marcial en un solista elocuente y encantador, tanto por el inspirado movimiento lento como por el brillante final.
• La creación, oratorio para soprano, tenor, bajo, coro y orquesta, compuesto en 1796-98, texto anónimo. Vibrante relato musical de la historia bíblica, de la creación hasta Adán y Eva. Contiene numerosos pasajes de suma belleza.
• Misa Nelson, sobrenombre de la Misa no. 9 (Missa in angustiis) compuesta en 1798. Según una leyenda,  la obra celebra la victoria del Almirante Nelson en la Bahía de Abukir (o Batalla del Nilo) en 1798, un gran encuentro naval entre la marina real británica y la marina de la primera República francesa.  Otra crónica relata que Nelson la escuchó en Eisenstadt en 1800. 

Fuente: BBC Music, Freya Parr.