Como una atmósfera cargada de tradición y modernidad que rinde homenaje a las 68 culturas originarias de México. Así podría definirse el proyecto Niman Axkan (“Ahora mismo”, en náhuatl), emprendido por el compositor y director de orquesta Felipe Pérez Santiago, que lo llevó a la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes el 10 de agosto pasado y con el cual quiso reconocer la música originaria de México, pero desde una perspectiva contemporánea, actual y moderna.
El proyecto, que incluyó la participación del Vórtice Ensamble, la Banda Sinfónica Infantil y Juvenil de Huejotzingo, Puebla, así como una decena de cantantes en lenguas mixe, maya k’iche, tzotzil y zapoteca, con un total de 70 músicos en escena, rindió homenaje a las lenguas originarias, pero desde el jazz, la música contemporánea, electrónica y otros ritmos.
Así lo detalló Pérez Santiago, quien señaló que prevalece una idea preconcebida al hablar de conciertos de música originaria, como si sólo existiera lo tradicional o folclórico. “Y aunque es necesario nunca perder nuestras tradiciones, Niman Axkan trata de decir que la música de las comunidades indígenas está viva y que no sólo es La sandunga, La llorona o Dios nunca muere, sino que está viva.
Hoy casi todas las comunidades indígenas tienen acceso a internet y los jóvenes escuchan YouTube, Spotify y otras plataformas de streaming en las cuales se empapan de otras tradiciones, desde música comercial hasta lo más experimental, y esto lo empiezan a combinar con sus tradiciones sonoras, pero, para mí, lo más interesante es que lo combinan con sus lenguas originarias”, aseveró.
Niman Axkan, precisó Pérez Santiago, contiene una amplia paleta de sonidos, que incluye al conjunto Kujipi, que combina la tradición de las bandas de viento oaxaqueñas con la música de los Balcanes y el rap en lengua mixe; así como el death metal de la Banda Xipe Totec, con canciones en lengua náhuatl; y el jazz electrónico de Benjamín Kumantuk Xuxpë.
Recordó que este proyecto nació en 2022 en una colaboración entre Vórtice Ensamble y la Red de Investigación de las Américas (Arenet), como parte de la iniciativa Coling, para crear y compartir prácticas de revitalización de lenguas indígenas en las Américas y en Europa.
La idea no era para crear música tradicional de sus comunidades, sino a partir de sus expresiones musicales, de la música contemporánea que están haciendo, pero cantada en su lengua y en combinación con su tradición sonora de siempre”.
Fuente: Juan Carlos Talavera para excelsior.com.mx
Comentarios