Terezie Fialová, piano
Roman Patočka, violin
Jiří Bárta, violoncello
El Trío con piano en sol menor nos transporta al inicio de la carrera de Bedřich Smetana, a un momento en el que luchaba por lograr reconocimiento y aceptación como compositor. En aquel momento corrían tiempos difíciles en Bohemia. La guerra civil había estallado en muchas zonas del Imperio de los Habsburgo, incluida Bohemia, y Smetana (1824-84) se volvió políticamente activo en 1846. La instalación de un régimen dictatorial represivo seguramente jugó un papel en su decisión de abandonar Bohemia en 1856. poco después de la composición de su Trío con piano en sol menor, para buscar oportunidades en Suecia.
En 1849, Smetana se casó con Kateřina Kolářová y se convirtieron en padres de cuatro hijas en rápida sucesión. La mayor de ellos, Bedřiška (el homónimo de su padre), mostró signos tempranos de precocidad musical, al igual que su padre. La apodó Fritzi y fomentó sus inclinaciones a cantar y tocar el piano, cosas que hacía con un marcado grado de sensibilidad musical cuando tenía cuatro años.
El Trío con piano en sol menor fue el primer gran logro de Smetana como compositor, inspirado en un acontecimiento trágico específico. El 9 de junio de 1854 murió la segunda hija de los Smetana, Gabriela, y el 6 de septiembre de 1855 Bedřiška la siguió hasta la tumba. Gracias a sus aptitudes musicales, su padre la adoraba especialmente y estaba devastado por la pérdida. La cuarta hija de los Smetana, Kateřina, había nacido menos de dos semanas antes de la muerte de Bedřiška; ella también moriría al año siguiente. Sólo la tercera hija, Žofie, viviría una vida plena. Es más, a la esposa de Smetana le diagnosticaron tuberculosis en 1855; viviría sólo hasta 1859. “Nada puede reemplazar a Fritzi”, escribió Smetana en su diario, “el ángel que la muerte nos ha robado”. Inmediatamente comenzó a escribir su Trío con piano en sol menor, que dedicó “en memoria de nuestra hija mayor Bedřiška, cuyo raro talento musical nos hizo tanto deleite; “La muerte nos arrebató demasiado pronto a la edad de cuatro años y medio”.
A pesar de la obvia emoción detrás de la pieza y la habilidad que Smetana mostró al elaborar su material, el Trío con piano fue recibido fríamente por los críticos en su estreno, en diciembre de 1855. Sólo cuando Liszt ensalzó la obra, después de escucharla en la casa de los Smetana durante una visita a Praga al año siguiente cambió su suerte.
Animado por esto, Smetana volvió a su partitura y realizó una serie de revisiones una vez que se instaló en su nuevo trabajo en Gotemburgo, Suecia. Lo retocó aún más antes de su publicación en 1880, y es en esta versión definitiva que la obra pasó a convertirse en el elemento básico del repertorio que es hoy.
Fuente: James M. Keller para la Orquesta Sinfónica de San Francisco
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