Danza tradicional polaca, cuyo nombre en francés, polonaise (adoptado aún en Polonia) data de principios del siglo XVII. Bajo sus diversas formas, conserva siempre su compás de ¾ y su movimiento moderado. Algunos historiadores le atribuyen un origen popular (los campesinos polacos bailan desde hace siglos danzas cantadas similares) mientras que otros sugieren un origen aristocrático y puramente instrumental (ascenso al trono de Polonia de Enrique de Valois en 1574).
Fue introducida a Alemania (donde Telemann fue uno de sus más activos promotores) y, después, en el resto de Europa donde estuvo de gran moda en los siglos XVIII y XIX. Figura en suites de Bach, en sonatas de Mozart y en conciertos de Beethoven y óperas de Chaikovski, siguiendo formas bastante divergentes. Pero su consagración es en las obras maestras pianísticas – de Weber, Chopin, Liszt – donde adquiere un tono heroico y un ritmo de acompañamiento característico: Bach, Suite núm. 2 (con variaciones para la flauta); Concierto Brandenburgo núm.1 (segundo trío del minueto fianl); Mozart, Sonata para piano en re, K.284 (final: Rondó en polonaise); Chopin, Polonesas para piano (y una para violonchelo y piano); Liszt, Dos polonesas para piano.
Fuente: Roland de Candé, Dictionnaire de musique, Seuil, Paris, 1997.
Telemann
Chopin
https://youtu.be/gFlyKTyFfrs
Comentarios