Flauta, instrumento que recupera el esplendor de antaño
La flauta, instrumento musical cuyo origen se remonta a más de cuatro mil años, fue conocida por los egipcios, griegos y romanos, y en China se han encontrado flautas de hueso y bambú fabricadas miles de años atrás.
Después de aquellos primeros instrumentos utilizados con finalidad religiosa y de entretenimiento, se crearon otros más sofisticados, como el oboe, muy popular en la Edad Media.
En el siglo XVII, durante el Barroco, se incluyeron las flautas traveseras en el ámbito académico y orquestal, lo que significó una separación con el entorno popular.
Tipos de flauta instrumento musical
En un sentido amplio, la flauta es todo instrumento de viento de madera que no requiera de lengüeta (oboe, clarinete, o fagot).
En la música culta el término se refiere solamente a la flauta travesera —que originalmente se construía de madera y hoy se hace de metal— y a la flauta de pico en sus diferentes tamaños. Éstas últimas se utilizan casi exclusivamente en la música barroca, mientras que la flauta travesera se toca en la orquesta moderna, pudiendo tener diferentes tamaños: así tenemos la aguda e incisiva flauta piccolo y la flauta travesera de tamaño normal, además de la flauta contralto y la flauta bajo, que también se utilizan de vez en cuando.
Flauta dulce o de pico
La flauta de pico o flauta dulce se construye en diferentes tamaños, desde la pequeña sopranino, pasando por la discanto y la tenor, hasta la enorme flauta contrabajo. Los instrumentos precursores de los actuales fueron utilizados primeramente en los consorts, hasta que a finales del siglo XVII se les otorgó el privilegio de convertirse también en instrumentos solistas, por ejemplo en las sonatas de Händel o en el cuarto de los Conciertos de Brandenburgo de Bach.
Flauta travesera
Se toca, como su nombre lo indica, de forma transversal, y el aire pasa a través de una abertura sencilla. Los instrumentos antiguos eran de madera; el instrumento moderno se construye de metal.
Fuente: Eckhardt van den Hoogen, El ABC de la música clásica, México, Taurus, 2011.
Comentarios