El estilo lariano
Muchos se han referido al estilo de Agustín Lara, pero pocos han intentado definirlo, si no es a través de sus letras románticas y neo modernistas.
Muchos se han referido al estilo de Agustín Lara, pero pocos han intentado definirlo, si no es a través de sus letras románticas y neo modernistas.
El Himno a Tamaulipas fue escrito en 1925 por Rafael Antonio Pérez Pérez (letra) y Alfredo Tamayo Marín (música), con instrumentación del músico neoleonés José María Barrientos Garza.
El mito o una de sus versiones inicia en la risueña Tlacotalpan, a orillas del río Papaloapan. Una modesta casa ostenta una orgullosa inscripción: aquí nació Agustín Lara
Los indígenas adoptaron sólo de manera parcial la música y los instrumentos europeos, creando un arte musical con características propias.
La aparición de las orquestas al estilo norteamericano de los años cuarenta, generó la creación de todo una serie de canciones que, por sus lineamientos más estándares y más cercanos al gusto internacional, resultaron fácilmente exportables.
Con letra del poeta Ramón Galguera Noverola y música del violinista, compositor y director de orquesta Efraín Pérez Cámara
La aparición de Agustín Lara en el panorama de la canción, marcó la entrada de una nueva sensibilidad.
La canción romántica. El final de la década de los veinte marca también la aparición del intérprete como artista especializado.
Durante los efervescentes años veinte, la inspiración romántica discurrió por muy variados senderos
Es difícil especificar qué es lo que los oyentes, compositores e intérpretes entienden por canción romántica
Los primeros instrumentos musicales de que se tiene registro en Tabasco fueron de percusión y de viento.
En 1909 aparecieron publicados en Yucatán dos cancioneros: el Ruiseñor yucateco y el cancionero conocido como de Chan Cil que contenía 40 canciones